Se nos presentan numerosas situaciones en las que un niño o niña viene con un gatito recién nacido que por una u otra razón no podrá ser criado por su madre. El caso más frecuente es el del gatito encontrado después de un abandono.
¿Cómo lo vamos a alimentar?,
¿Qué otros cuidados son importantes para él?,
¿Es importante educarlo y
.... sabremos hacerlo?.
No cabe duda de que la empresa es difícil y sabemos que las posibilidades de éxito son limitadas porque la madre biológica es la que mejor puede desempeñar todas estas tareas.
Comenzaremos por explicar algunos conceptos de la socialización del cachorro y terminaremos centrándonos en la alimentación desde el primer día hasta el mes largo de edad. La lactación natural dura unos dos meses pero veremos que este periodo puede ser acortado si proporcionamos al gatito una transición correcta hacia un pienso seco.
La educación del gato: su socialización.
En condiciones naturales los cachorros viven en camadas con sus hermanos y la madre y en ocasiones con un grupo formado por otros adultos que a veces colaboran en su crianza. Esta vida en comunidad les dota del aprendizaje de conductas y habilidades que necesitarán para salir adelante como individuos adultos.
El trabajo del dueño de un gatito deberá conseguir que éste se adapte progresivamente al contacto con el hombre y otros gatos de forma que cuando alcance la madurez no tema relacionarse con unos y con otros ni reaccione con agresividad.
Se debe buscar un equilibrio entre las caricias del dueño, que suplirán la acción de la lengua de la madre , y el propósito de hacer que el cachorro no acabe teniendo un exceso de dependencia , para lo cual a medida que se vaya haciendo mayor deberemos acostumbrarlo a periodos crecientes en los que estará solo.
Debe ser estimulado a moverse y jugar cuando su madurez lo permita, se debe empezar alrededor de los 15 días de vida porque antes no es capaz de moverse con suficiente agilidad.
El gato tiene un periodo en el que aprenderá mejor a relacionarse con el hombre, es el periodo de socialización, se realiza entre la 2ª y 7ª semana de vida. Para favorecer esta fase deberá mantener contacto con un buen número de personas que lo tratarán con cariño y cuidado. Si todo esto se cumple tendremos muchas posibilidades de tener un adulto sociable, por el contrario, si el gatito no se acostumbra al contacto humano o este se efectúa con tratos bruscos, el animal puede tornarse esquivo y uraño en su edad adulta.
El cachorro deberá jugar con varias personas y durante un periodo de al menos 40 minutos cada día.
La socialización intraespecífica se ve muy favorecida si el cachorro tiene uno o varios hermanos, cuando esto no se cumple será muy conveniente que tenga contacto con adultos sanos de su especie, cuantos más mejor, en etapas tempranas de su desarrollo. Debemos estar vigilantes en estos encuentros puesto que conocemos que en ocasiones los adultos recelan de otros individuos y podrían presentarse trifulcas y agresiones.
La alimentación del gatito.
Sin duda el factor más relevante y de más difícil solución es la alimentación del cachorro.
La lactancia se divide en dos periodos bien definidos:
-Periodo calostral: Uno o ,a lo sumo, dos días de duración
-Resto de lactancia obligada: Un mínimo de 30 días de lactancia
El inicio es el periodo calostral. El calostro es necesario porque es muy rico en anticuerpos maternales frente a numerosos gérmenes ( virus, bacterias, hongos ) que el cachorro podría contraer, estos anticuerpos o inmunoglobulinas proporcionan al cachorro la llamada inmunidad pasiva, una protección que les hace falta hasta que son capaces de generar sus propias defensas - su inmunidad activa- a partir de aproximádamente los dos meses de edad.
El intestino del cachorro está preparado para recibir estas defensas durante uno a tres días según algunos investigadores, aunque numerosos estudios indican que este periodo se reduce a las primeras 20 horas de vida.
Es habitual que el gatito huérfano nos llege habiendo superado este periodo porque ha tetado estos primeros días, pero si sospechamos que esto no se ha conseguido, lo ideal sería, aunque es muy difícil llevarlo a cabo, alimentarlo con calostro de otra hembra.
Otros procedimientos que se indican como efectivos son la alimentación con leche de otra gata ya que guarda una alta riqueza en anticuerpos durante toda la lactación e incluso la administración oral de suero sanguíneo de un gato adulto que cumpla con los programas vacunales.
Vemos que estos procedimientos son difíciles y por tanto lo que, salvo casos excepcionales se hace, es la alimentación con preparados lácteos que pueden cubrir eficazmente las necesidades nutricionales del gato.
La lactación mínima acaba alrededor de los 30 días. Desde el día 25 podemos hacer una transición al pienso de cachorro añadiendo a las tomas de la leche preparada en biberón cantidades crecientes de bolas de pienso mezcladas con esta misma leche o incluso suministrando patés especiales para gato joven. Este periodo transitorio puede terminar a los 35 – 45 días de lactancia a partir de los cuales el gato ya se alimentará de un pienso preparado para gatos pequeñines.
También prestaremos atención a.....
Los gatitos se beneficiarán si los primeros días les ayudamos a hacer sus necesidades frotando la zona perianal con una gasa humedecida en agua, cada vez que hagan una toma de biberón. Así imitamos el gesto de la madre que lame esa zona con tal propósito.
A partir de las 3 semanas de edad ya podemos acostumbrarle a la caja con arena, al contacto con el cepillo y a afilarle las uñas en un rascador con el fin de que no utilice para ese menester las cortinas o el sofá.
La temperatura del entorno ha de ser alta, la primera semana de unos 30 grados y las siguientes ,hasta la cuarta, de unos 25. Lo lograremos muy fácilmente si colocamos una estufa cerca o hacemos el nido de los cachorros sobre una bolsa de agua caliente o manta eléctrica.
La humedad es también importante para prevenir enfermedades del sistema respiratorio y lo que conviene es que esté en valores altos. Podemos poner recipientes de agua sobre los radiadores o cerca de las fuentes térmicas que utilicemos.
Esperamos que este acercamiento al cuidado del gato joven les sea de ayuda, el perrito huérfano necesita atenciones y cuidados muy parecidos que quizá tratemos en otro artículo. Sean lo más felices que puedan.
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